Con prisas y con pausas (publicitarias) nos reencontramos en una nueva versión de espera catódica. Fue en nuestro habitual amago de despedida directa, prefin de semana. Aunque mañana a las 21 horas es imperdible el resumen de lo mejor o mejorcito, en versión remasterizada y simpática, todo con el rostro amable y gracíl de la genuina Beatriz Gutiérrez. Precisamente, en una ruptura insólita del orden de programa juevero, abrió con sus compañeros de tertulia el TeA. Bien acompañada de Javier Collantes -fiel o más- y el bienplantado y telegénico Luis Lazarich, Bea habló y despotricó de los Oscar, hasta avanzó los del próximo año. Quedó tiempo para dar opiniones de los estilismos varios de la alfombra roja conquistada por Pe e incluso para adelantar estrenos de pantalla grande como el contraataque de Ché o La Pantera Rosa. Por haber hubo hasta 'Palabrerío', que en negativo llevó a la caja los corazones solitarios, los flashback y las voces en off. De cine.
No podemos perder el tren divulgativo y comprometido, por eso Juan Carlos Ruiz volvió con su mirada particular. Esta vez nos trasladó al Sahara, con la presencia estelar de Carmen Pérez, Presidenta de la ONG Cantabria por el Sahara, y Zahra Ramdan, Presidenta de la Asociación de Mujeres Saharauis en España y Responsable de Derechos Humanos de la Unión de Mujeres Saharauis. Fue muy instructivo escuchar de viva voz su lucha constante por la justicia social, por un pueblo tan oprimido y olvidado. Se merecen nuestro apoyo incondicional. Si hasta Javier Bardem les cede su imagen, hagamos algo por compensar su lucha histórica.
Entre nervios y dudas, pero con las ganas de agradar y sorprender, cerramos nuestro TeA con la visita de los Marceros de Cacicedo, con Juan Salmón al frente, que a su vez es el Presidente de la Asociación Cultural y MedioAmbiental Genoz. Fue un gusto que casi veinte hombretones de raíces cántabras interpretaran un par de marzas, bien ataviados, con cuevanucos y palos como acompañantes de lo tradicional. Un gusto que quisimos compartir con la audiencia a modo de guiño.
Y es que hay que exaltar marzo y todo lo que se ponga por delante. Para nosotros casi unos días de apagón. Aunque los viernes y domingos nos fundimos con momentos para guardar en la retina... Y el martes si nada no lo impide retomaremos nuestra espera paciente.
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